La ONU debe defender más eficazmente los derechos de las mujeres
Una fuente de agua y su cuidadora en Soweto (Kibera)Haz clic para ampliar
Una fuente de agua y su cuidadora en Soweto (Kibera), el asentamiento precario más grande de África. En 2004, el Gobierno de Kenya inició un programa de mejoramiento de suburbios en Soweto, con el apoyo de ONU-Hábitat. © Amnistía Internacional
Ya somos 11.601 firmantes
“Si usamos un cubo de agua para lavarnos y empezamos por los pies, el agua se gastará sólo en los pies. Pero si nos echamos el agua por la cabeza, nos lavaremos todo el cuerpo".
Defensora de derechos humanos nepalí, explicando cómo puede beneficiar a las mujeres la creación de una nueva entidad reforzada de la ONU en materia de mujeres.
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La ONU es una fuerza impulsora de normas y compromisos internacionales destinados a proteger y promover los derechos humanos de las mujeres, especialmente las que están expuestas a sufrir violencia o que viven en la pobreza. Sin embargo, no cuenta con mecanismos adecuados ni con suficiente financiación. Esto ha limitado en todo el mundo las posibilidades de las mujeres de disfrutar plenamente de sus derechos humanos.
En septiembre de 2009, tras años de campaña realizada por defensores y defensoras de los derechos humanos de las mujeres en todo el mundo, los 192 Estados miembros de la Asamblea General de la ONU adoptaron una resolución en la que se acordaba la creación de una entidad de la ONU consolidada y reforzada para las mujeres.
Esta iniciativa supone una gran victoria para los derechos de las mujeres. El próximo paso es garantizar que la entidad creada es fuerte y capaz de impulsar la realización de los derechos de las mujeres con eficacia. La nueva entidad debe contar con el compromiso político de todos los gobiernos y con financiación inmediata y suficiente, que garantice su establecimiento y adecuado funcionamiento.
Por los derechos de las mujeres y las niñas en el mundo.
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Una fuente de agua y su cuidadora en Soweto (Kibera), el asentamiento precario más grande de África. En 2004, el Gobierno de Kenya inició un programa de mejoramiento de suburbios en Soweto, con el apoyo de ONU-Hábitat. © Amnistía Internacional
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“Si usamos un cubo de agua para lavarnos y empezamos por los pies, el agua se gastará sólo en los pies. Pero si nos echamos el agua por la cabeza, nos lavaremos todo el cuerpo".
Defensora de derechos humanos nepalí, explicando cómo puede beneficiar a las mujeres la creación de una nueva entidad reforzada de la ONU en materia de mujeres.
La ONU es una fuerza impulsora de normas y compromisos internacionales destinados a proteger y promover los derechos humanos de las mujeres, especialmente las que están expuestas a sufrir violencia o que viven en la pobreza. Sin embargo, no cuenta con mecanismos adecuados ni con suficiente financiación. Esto ha limitado en todo el mundo las posibilidades de las mujeres de disfrutar plenamente de sus derechos humanos.
En septiembre de 2009, tras años de campaña realizada por defensores y defensoras de los derechos humanos de las mujeres en todo el mundo, los 192 Estados miembros de la Asamblea General de la ONU adoptaron una resolución en la que se acordaba la creación de una entidad de la ONU consolidada y reforzada para las mujeres.
Esta iniciativa supone una gran victoria para los derechos de las mujeres. El próximo paso es garantizar que la entidad creada es fuerte y capaz de impulsar la realización de los derechos de las mujeres con eficacia. La nueva entidad debe contar con el compromiso político de todos los gobiernos y con financiación inmediata y suficiente, que garantice su establecimiento y adecuado funcionamiento.
Por los derechos de las mujeres y las niñas en el mundo.
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